Post Operatorio

Caracas Cirujano Plástico

En esta etapa del proceso quirúrgico, el paciente debe recibir una instrucción clara, además de algunos cuidados generales y otros específicos según el procedimiento que se haya realizado. En esta fase se debe ofrecer apoyo permanente al paciente, ya sea por parte de su propio cirujano o por otros que pertenezcan a su equipo.

La Clínica donde se realicen las intervenciones, debe contar con un área adecuada de recuperación y hospitalización.

Nos referimos aquí a los aspectos generales, las instrucciones post operatorias específicas se encuentran en cada uno de los procedimientos.

Reposo

Este puede ser absoluto, es decir descanso permanente en cama, o relativo, en el cual se recomiendan actividades que no requieran esfuerzo mayor y se restringen otras que si lo precisen como por ejemplo: levantar objetos pesados y conducir. Dependiendo de cada operación se indicara el reposo de manera mas especifica.

En cuanto al ejercicio físico, este sé podrá reiniciar hacia la 4ta semana aproximadamente, teniendo en cuenta algunas variaciones en este patrón, dependiendo del tipo de operación y del comportamiento del organismo de cada paciente.

Antibióticos

Existe controversia entre los cirujanos acerca de sí se debe o no utilizar antibióticos de rutina después de las intervenciones. Sin embargo se siguen utilizando de manera preventiva por la mayoría, con el propósito de proteger al paciente de potenciales procesos infecciosos.

Analgésicos y Anti inflamatorios

En general todas las operaciones pueden producir algunas incomodidades transitorias, entre ellas el dolor y en la gran mayoría de los post-operatorios se producen molestias tolerables. De cualquier forma contamos con una gran variedad de medicamentos para manejar el dolor, el cual varía, dependiendo de cada paciente y su respuesta personal ante estos factores.

Además de los analgésicos, también podemos recurrir a algunos Anti inflamatorios, preferiblemente del tipo enzimático, los cuales promueven la desinflamación y la recuperación de los tejidos de manera más natural y fisiológica.

Cuidados Locales

Después de cualquier intervención, se deben practicar “curaciones” periódicas de las heridas resultantes. Estas se practicaran por parte del paciente en su residencia y en el consultorio o clínica por parte del cirujano o personal de su grupo medico. El aspecto más importante en una curación es la limpieza o lavado de las heridas quirúrgicas. Algunas veces se cubrirán con alguna crema, con gasa o apósitos y en otros casos se dejaran descubiertas.

Se indica frecuentemente la utilización del frío local para tratar la inflamación y el dolor.

De igual manera se recomienda evitar la exposición directa al sol por un lapso que va de 4 a12 semanas, evitando asi mayor inflamación y la aparición de manchas (hiperpigmentación) en zonas con cicatrices recientes o que persistan con algún morado (equimosis).

Seguimiento Medico

Se estima de vital importancia el control medico post-operatorio periódico por parte del cirujano, ya que solo de esta manera se tendrá una visión adecuada de la evolución del proceso, permitiendo realizar los ajustes necesarios en las recomendaciones y en el tratamiento medico indicado.

Otra razón muy importante para mantener contacto estrecho con el paciente, es el apoyo emocional, el cual genera confianza y seguridad en esta importante etapa del proceso quirúrgico.

Alimentación

En algunos casos, se recomienda tomar alimentos que no requieran un gran esfuerzo al masticar (cirugía facial) o que sean de fácil digestión (cirugía abdominal).

No se debe restringir la alimentación en el postoperatorio, pues esta es muy importante para la recuperación de los tejidos intervenidos, pudiendo generar debilidad, mareos y lentitud en la cicatrización. Se recomienda una alimentación balanceada y con sentido común.

Teniendo en cuenta los errores que todos cometemos en cuanto a la alimentación se refiere, recomendamos no hacer dietas en las que se restrinja demasiado la ingesta, ya que estas generalmente proponen limitaciones transitorias, prometiendo una reducción rápida de peso, pero al retomar los hábitos anteriores habremos perdido todo nuestro esfuerzo.

El significado que tiene para nosotros la palabra dieta, en cuanto a restricción se refiere, produce hambre y estrés. Por tanto lo más conveniente y eficaz es cambiar nuestros hábitos alimenticios.

No somos especialistas en nutrición, pero podemos transmitir algunas ideas que se pueden llevar a la práctica con facilidad, aprovechando la motivación resultante de ver que se tiene un cuerpo más delgado y con forma renovada luego de haberse practicado algún tipo de procedimiento quirúrgico.

En términos generales recomendamos no pasar hambre, solo reducir sustancialmente los carbohidratos simples como por ejemplo; el azúcar refinada, pan blanco, pastas y harina refinada de maíz, entre otros, reemplazándolos por carbohidratos complejos como los encontrados en todos los productos integrales y cambiando el azúcar refinada por algún edulcorante bajo en calorías.

Incrementar el consumo de proteínas (carne-pollo-pavo-huevos-pescado-mariscos-leche y sus derivados) en cada comida, haciéndolas predominar sobre los carbohidratos y acompañándolas preferiblemente con productos integrales, vegetales y hortalizas.

Nunca saltarse una comida y menos el desayuno, ya que el organismo lo interpreta como una emergencia y hace mas lento el metabolismo, con lo cual almacenamos mas y quemamos menos calorías.

Se recomienda no solo siempre desayunar, sino que este sea rico en Proteínas, ya que se ha demostrado que estas nos mantienen más alerta en la mañana y aceleran el metabolismo, con lo cual se queman más calorías y evitamos consumir las proteínas de nuestra piel, tendones y masa muscular.

Drenajes

Los sistemas de drenaje, son utilizados como medida de cuidado post-operatorio en numerosas intervenciones con el propósito de facilitar la salida de algunos fluidos que se pueden acumular luego de determinados procedimientos quirúrgicos.

Disponemos de diversos tipos de drenajes, asi como de materiales para su elaboración, aunque básicamente existen unos abiertos, que simplemente mantienen un espacio que facilita la salida del líquido y otros cerrados los cuales lo succionan por medio de presión negativa.

Existen algunas diferencias de opinión entre cirujanos, en cuanto a sí se deben utilizar o no drenajes post-operatorios.

La indicación del drenaje, su tipo y duración, depende de la experiencia y el uso adecuado del sentido común de cada cual, teniendo en cuenta que la no-utilización de drenajes adecuados en intervenciones en las cuales estén indicados, puede ser causa de complicaciones por retención de los fluidos producidos en el post-operatorio.

Fajas y Vendajes

Dentro de los cuidados post-operatorios de algunas intervenciones como la lipoescultura y la abdominoplastia, entre otras, se encuentra la utilización de fajas y/o vendajes (preso terapia), los cuales tienen como propósito ejercer presión moderada sobre zonas que han sido “vaciadas” o “despegadas” por dichos procedimientos, para asi mantener “cerrados” estos espacios resultantes.

La presión de estos elementos debe ser siempre moderada y vigilada periódicamente por el cirujano, quien recomendara los ajustes necesarios.

La utilización de fajas y vendajes, asi como sucede con los drenajes, esta muy difundida entre la mayoría de los cirujanos, pero también puede ser motivo de discrepancia en algunos casos, siendo nuevamente la experiencia personal y su sentido común lo que determine su uso.

Drenaje Linfático

Este es uno de los recursos más recomendado para acelerar el proceso de recuperación y hacerlo más cómodo para el paciente. La justificación de su práctica, se debe a la capacidad para estimular el flujo del líquido linfático a través de los conductos que han sido lesionados transitoriamente por el traumatismo quirúrgico.

Esta técnica ideada y perfeccionada en Alemania hace mas de 40 años, también produce una aceleración en la recuperación de los conductos linfáticos y por tanto una reducción del edema (liquido retenido en el espacio que hay entre las células) post-operatorio.

El drenaje linfático no es un masaje común, aunque puede combinarse con este en algunas áreas que lo requieran, además debe practicarse manualmente por profesionales capacitados en su práctica específica.

El momento ideal para iniciar el DL asi como su frecuencia y numero de sesiones serán determinada por cada cirujano, según su experiencia, adaptándose a cada caso y teniendo en cuenta la opinión del terapeuta que lo este aplicando.

No aconsejamos iniciar el drenaje linfático antes del 6to al 8vo día post-operatorio, pues la manipulación temprana de ciertas áreas, pueden causar seromas, es decir acumulación de fluido seroso.

No fumar

La importancia de esta recomendación se debe, entre muchos otros, al efecto nocivo de los tóxicos del cigarrillo sobre la micro circulación y por tanto en la reducción en la nutrición y oxigenación de los tejidos, lo cual entorpece el proceso de recuperación y cicatrización.

Caracas Cirugía de Senos

Cirugía Plástica Estética Caracas